Carlos y Kimberley Belez trabajaron con Sinergia en 2019, interpretando talleres y equipos de misión norteamericanos.
En 2020, se unen formalmente a nuestro equipo. Carlos se especializará en Desarrollo de Liderazgo en Desarrollo Comunitario, conectando, capacitando y monitoreando líderes y organizaciones dedicadas a la transformación social y espiritual de personas y comunidades a través de iniciativas de transformación y/o desarrollo comunitario. Kimberley trabajará como Coordinadora de Comunicaciones, encontrando y comunicando historias e información a socios y simpatizantes nacionales e internacionales de cómo Dios está trabajando a través de Sinergia para impactar positivamente a las personas y comunidades.
Carlos nació y creció en República Dominicana, y desde su adolescencia ha sentido que Dios lo llama para servir en misiones. Ha servido con misioneros estadounidenses y ha dirigido ministerios de jóvenes y solteros en Santo Domingo. También ha trabajado en Ventas y Servicio al Cliente en RD y EEUU. Kimberley nació y creció en Canadá. Su padre era un pastor reformado cristiano y misionero en Canadá y Estados Unidos. Ha ocupado varios cargos en Recursos Humanos y Administración de Oficinas en la industria privada, una iglesia y una clínica médica sin fines de lucro. Anteriormente pasó 3 años como misionera en Jarabacoa. Juntos han enseñado una clase de inglés, trabajado con equipos norteamericanos, dirigido un estudio bíblico en español en Virginia, EE.UU., y mentorizado jóvenes creyentes.
Carlos y Kimberley dicen: “Nos encanta el modelo de Sinergia de servir como aliado que equipa y fortalece a los líderes en iglesias, comunidades y escuelas. Creemos que Dios está usando Sinergia para transformar a las personas y comunidades vulnerables en República Dominicana y nos sentimos bendecidos de unirnos al equipo. Como pareja intercultural, deseamos que nuestro matrimonio sea un ejemplo de celebración de las diferencias mientras nos aferramos a las verdades de Cristo. Amamos a Jesús y queremos ver Su nombre proclamado como Rey de Reyes en República Dominicana y en todo el mundo”.
Carlos y Kimberley se conocieron en el gimnasio de Jarabacoa y se enamoraron mientras caminaban en las montañas interiores de República Dominicana. Todavía disfrutan haciendo ejercicio y pasando tiempo en la belleza de la creación de Dios, sin importar en qué país se encuentran.